POR: SOLEDAD CARRIZO (*)

La realidad impulsa nuevas formas laborales que reclaman una regulación jurídica mediante herramientas que desbordan las tradicionales formas de contratación.

El creciente desarrollo del sector tecnológico y las nuevas demandas de consumo generan nuevas formas de vinculación laboral: el trabajo en plataformas bajo demanda o comúnmente conocido como APPS ofrece oportunidades laborales a gran cantidad de jóvenes.

El rápido crecimiento de estas nuevas formas de organización empresarial y la amplia oferta laboral interesada en incorporarse ha desbordado las previsiones normativas que el derecho laboral argentino conocía: carecemos de una regulación que contemple equilibradamente estos proyectos laborales y el resguardo a sus trabajadores.

La configuración de estas modalidades supera las tradicionales relaciones de dependencia, y requiere una readecuación normativa.

La rigidez de la vinculación laboral tradicional bajo la ley de contrato de trabajo y la ausencia de una contemplación normativa específica que recepte las particularidades de estas nuevas formas se traducen en la marginalización de trabajadores sujetos a inseguridad, remuneraciones inferiores, ausencia de protecciones laborales, e imprevisibilidad sobre su futuro.

Hoy el mundo se enfrenta a cambios tecnológico que impactan transversalmente sobre las relaciones humanas y laborales, demandando una readecuación y modernización de los ordenamientos jurídicos.

Esta nueva modalidad de trabajo demanda un enorme desafío que el Congreso de la Nación debe reconocer y acompañar, legislando con nuevos criterios y formas de protección para todas las partes involucradas.

Desde mi lugar he presentado un proyecto de ley que propone un estatuto especial regulatorio para estas formas laborales que no responden al paradigma de trabajo de dependencia tradicional, buscando el equilibrio entre el desarrollo tecnológico y la protección de los trabajadores.

(*) Diputada Nacional por Córdoba (UCR)