«Si el turismo no es para todos, no es turismo» afirma Alejandro Piccione, Guía Nacional de Turismo experto en accesibilidad y uno de los creadores de la “Champa Bike”, un vehículo adaptado que permite que las personas con discapacidad y/o movilidad reducida puedan disfrutar de la naturaleza sin límites.

En sus comienzos, como guía de Parques Nacionales, Alejandro realizó distintas visitas adaptadas y, desde entonces, sueña con que el turismo de nuestro país y del mundo sea inclusivo y accesible para todos.

El sueño de la accesibilidad

Convencido de que su sueño no era una utopía dedicó su vida a ello. En el camino conoció a Alejandro López, fundador de la Red de Turismo Accesible de la República Argentina; juntos decidieron trabajar para que la inclusión de las personas con discapacidad al turismo sea una realidad.

«La montaña es mi lugar en el mundo», afirma Alejandro. Y fue esa pasión y respeto por la naturaleza, combinada con su experiencia como Guía de Parques Nacionales, que lo llevaron a dar un paso más: crear la «Champa Bike» para demostrar que no existen limites ni barreras para la aventura.

Mucho más que una silla adaptada

«La champa Bike» es una silla adaptada que permite que las personas con discapacidad y/o movilidad reducida puedan acceder a aquellos lugares que con una silla de ruedas convencional no sería posible.

Además, puede utilizarse como un instrumento para realizar rescates en terrenos comprometidos de un modo mucho más simple y ágil en comparación con la tabla rígida que se utiliza actualmente por protocolo.

Sin embargo, «la champa» es mucho más que eso.

«La silla adaptada no es sólo para personas con discapacidad o para subir montañas, va más allá de eso. La «Champa Bike» se trata de abrir puertas y mentes, porque va más allá de su uso, es lo que se genera a partir de ella. Es otra manera de entender la vida y ver el mundo».

Reconoce Alejandro Piccione, su creador.

Luego de años de trabajo y perfeccionamiento, Alejandro abrió puertas y derribó barreras hasta que cumplió un sueño: la «Champa» se convirtió en un vehículo oficial en los Parques Nacionales de nuestro país.

Capacitación tras capacitación, la silla adaptada de Piccione fue consolidándose como un aporte fundamental de accesibilidad para el turismo en Argentina. Y así lo entendió la Administración de Parques Nacionales (APN), que recientemente adquirió no una sino 24 sillas adaptadas que serán distribuidas en 12 áreas protegidas de nuestro país.

El Champaquí como inspiración

Alejandro Piccione nació y vive actualmente en Tigre, Buenos Aires, pero al tener familiares y amigos en Córdoba, y especialmente por sus montañas, esta provincia ocupa un lugar muy importante en su vida.

«Respeto profundamente la cultura originaria en nuestras montañas. Hay toda una historia en ellas, y yo quise honrarla eligiendo el nombre de una montaña. La silla adaptada que creamos se llama «Champa Bike» para honrar el Cerro Champaquí.

De Argentina para el mundo

Sólo existen dos fábricas en el mundo que realizan estas sillas adaptadas. Una es francesa y cuesta 4.500 euros y la otra es la que fabrica Piccone, en Buenos Aires, por un valor aproximado de 340 mil pesos argentinos.

Cabe destacar, que dadas las condiciones de seguridad y las mejoras que se le introdujeron al modelo argentino, éste será utilizado en Italia y se espera que el producto nacional se expanda por toda Europa.

Derribando barreras

Hay acuerdo a nivel mundial que la discapacidad no es sinónimo de deficiencia. Es decir, la discapacidad no está en la persona sino que va a surgir de la interacción entre la deficiencia de una persona y las barreras que encuentre en el entorno.

Dicho de otro modo, una persona tendrá discapacidad cuando con motivo de una deficiencia encuentre limitaciones para realizar una actividad y/o restricciones para participar en la vida diaria.

En este sentido, hablar de accesibilidad resulta fundamental ya que derriba las barreras del entorno permitiendo que todas las personas, independientemente de sus limitaciones, puedan disfrutar de la vida en igualdad de condiciones.

La accesibilidad es un derecho cuyo cumplimiento dignifica la vida de las personas, y es por esto que la «champa bike» es mucho más que una silla adaptada.

Es el reflejo de lo que muchos soñamos cuando pensamos en el país que queremos. Es un símbolo de la igualdad de oportunidades que necesitan y la justicia que merecen las personas con discapacidad en nuestro país.

Sí, la «Champa Bike» es una silla adaptada, pero recorrerá Argentina como un ejemplo que se puede cambiar el mundo en una rueda.