POR: SOLEDAD CARRIZO (*)

Históricamente Córdoba ha mostrado un desarrollo asimétrico y desequilibrado en su interior, con preocupantes índices de detracción económicos y sociales en los departamentos que integran la región norte y noroeste de la provincia.

El proyecto de inversión que propone la empresa LAC, con el apoyo de Bridgestone para la radicación de una planta de recapado de neumáticos en Deán Funes es un ejemplo paradigmático de la labor conjunta entre el sector público y privado que esta zona reclama desde hace años.

Herramientas estratégicas

Tanto la provincia como el gobierno nacional deben trabajar en el diseño de herramientas estratégicas para un crecimiento sostenido y sustentable de las economías regionales, apoyando la inversión de actividades primarias, industriales y de servicios que logren armonizar el desarrollo dentro de la provincia.

Hoy debemos reflexionar desde un paradigma de políticas públicas transversales, que integren lo social con lo económico y lo ambiental, con resultados proyectados a largo plazo, y no simplemente como medidas reparadoras o paliativos cortoplacistas transitorios.

La promoción de las actividades productivas, agro industriales y de servicios permite no sólo la continuidad y conservación de fuentes de trabajo genuinas (algo muy necesario para nuestro norte) sino el debilitamiento de la migración y éxodo de sus pobladores, especialmente los jóvenes, que año a año se desplazan hacia centros industriales vecinos.

Mejor calidad de vida

Esto se materializará tanto en un mejoramiento de la calidad de vida para sus habitantes como en la generación de confianza en la zona, dotándola de un valor agregado y posicionándola como un lugar de interés para la radicación de futuras inversiones.

Hace tiempo que personalmente vengo insistiendo en la necesidad de crear un régimen especial de incentivo a través de exención y beneficios impositivos, aduaneros, económicos y de la seguridad social, que he propuesto a través de varios proyectos de ley que actualmente esperan avanzar dentro del Congreso.

Las políticas provinciales han sido durante muchos años indiferentes a los reclamos de la región norte, y hoy es tiempo de recuperar su valor e integrarla en un todo provincial, replicando en los 10 departamentos que integran este arco norte noroeste los mismos índices de desarrollo que vemos en el centro y sur del país.

(*) Diputada Nacional por Córdoba (UCR).